Durante nuestros primeros años de educación impera un ambiente distendido y relajado que nos lleva a forjar grandes lazos de confianza con nuestros compañeros y profesores, pero a medida que pasan los años las clases se van volviendo más y más serias, rígidas e incluso aburridas. ¿Es incompatible el humor y el aprendizaje?
Como decíamos en las anteriores líneas, parece que con el transcurso de los años la educación se va volviendo más y más formal, de ser todo risas a no tener espacio para las mismas en el aula, ¿a que se debe esto? ¿acaso no tiene ventajas usar el humor en clase?
Ventajas de usar el humor en las aulas.
- Facilita un clima agradable: Cuando nos reímos tendemos a estar más relajados, a tener menos miedo a equivocarnos y a ver al profesor como una persona más cercana. Todo ello contribuye a un mejor entorno de trabajo.
- Ayuda al aprendizaje: Cuando algo nos resulta tedioso y aburrido no queremos hacerlo y los minutos parecen horas. Por el contrario, gracias al humor las horas parecen minutos.
- Estimula la atención: Gracias a incluir pequeños chascarrillos, chistes o historias personales puedes romper la dinámica de la clase y así volver a conectar con los alumnos o mantenerlos “enchufados”
- Disminuye los conflictos: Si la clase está en un ambiente serio los alumnos tendrán miedo a fallar, por el contrario, si hay humor de por medio los fallos pueden ser tomados como bromas o incluso se puede hacer gracias al respecto.
- Estimula la creatividad: Al usar el humor, los alumnos potencian su imaginación y espontaneidad.
Como todo en la vida, el humor tampoco es perfecto, por ello hay ciertos aspectos que tener en cuenta si quieres que en tus clases haya humor, pero que la clase no se descontrole.
- Diferencia la clase del patio: Una cosa es el aulario y otra el patio de recreo, debes dejar eso claro y aunque el ambiente sea distendido, hay ciertos limites que con el profesor delante no se pueden cruzar.
- Restringe los abusos: Una cosa es reírse en clase y otra reírse de un compañero. Aunque una respuesta sea graciosa, no permitas que se burlen de ningún alumno.
- No abuses: Aunque algo de humor puede darle un buen punto a las clases, demasiado puede ser un problema.
5 practicas que todos los profesores deberían incluir en sus clases
- Añadir recursos humorísticos con sus explicaciones, ya sean ejemplos propios, chistes o comentarios divertidos
- Reírse de sus errores, ya que nadie somos perfectos, quien mejor que tu profesor para reírse de sus propios errores en clase.
- Ejercicios prácticos y divertidos: A todos nos resulta mucho más ameno llevar a cabo acciones practicas que escuchar un sermón.
- Preguntas humorísticas: Incluir en los exámenes alguna pregunta y/o respuesta que sea graciosa para así romper la tensión.
- Memes actualizados: Los alumnos de hoy en día aman a los memes, si incluyes alguno actual o a su influencer del momento, les encantará.